viernes, 30 de agosto de 2013

Victor L. Rebuffo. Contraluz. Cuarta Parte.

"Si a principios de los años cincuenta las intenciones del artista apuntaban a editar un volu­men con estas xilografías —las dimensiones similares de las ciento treinta imágenes dan cuen­ta de un «concepto libro»— fue él mismo quien, según su recuerdo, canceló el proyecto. En el prólogo de Contraluz, el libro de 1979 en el que publicó finalmente esas antiguas imágenes, sostenía que esas series «estaban destinadas especialmente a evadir la mente de las imposicio­nes que restringían las libres expresiones del pensamiento (...) Los mismos motivos invocados, pretexto para estas xilografías, impidieron a su hora, su edición». Un año después, Rebuffo retomaba de forma más abierta esta cuestión, señalando que «como yo era en ese momento director de la Escuela de Artes Gráficas, lo podía imprimir allí, pagando el papel; pero era una época, el 53, en que debía poner el retrato de la pareja, imagínese, en un libro de grabados. Entonces abandoné el proyecto. (…) (son) grabados que se refieren a la Semana Trágica, barri­cadas hechas con tranvías, las calles de Buenos Aires en esos días. Todo este clima, estos acontecimientos también estaban reflejados por la literatura de Castelnuovo y Álvaro Yunque; al igual que los hermanos Tuñón» [1]. Esta cita tardía del artista, más allá de retomar la relación entre gráfica y literatura social de la época, señala su punto de vista sobre la implícita «incom­patibilidad» entre grabado social y peronismo: para este artista, el rol de arte comprometido asignado al grabado se sustentaba en un deber ser dentro de los límites de la militancia de izquierda.”





[1] Declaraciones en entrevista en Blanco y Negro, Buenos Aires, abril- mayo- junio de 1980, s/p. Archivo Héctor Rebuffo. El destacado es nuestro


 Extraído del libro “Rebuffo y el Grabado Moderno”, del capítulo “Víctor Rebuffo y la tradición del grabado en la Argentina”  escrito por Silvia Dulko.





lunes, 26 de agosto de 2013

Delia Cugat

Aunque las reproducciones no sean todo lo fidedignas que podrían ser (por no escribir sobre su dudosa calidad), no quería dejar pasar la oportunidad de compartir los grabados y dibujos en tinta de la protagonista del fascículo 94 de la colección de Pintores Argentinos publicada por el CEAL, de la Serie Complementaria de los Grabadores Argentinos del Siglo XX.















miércoles, 21 de agosto de 2013

De Max Liebermann a Werner Heldt. Arte Berlinés entre 1930 y 1961. Primera Parte.

Catálogo que pinta el panorama artístico en el difícil contexto del ascenso del nacional/socialismo en Alemania, y la catátrofe que esto significó para los artistas berlineses y la cultura en general, comprendiendo también los años de la segunda posguerra. 
Prohibiciones para pintar y exponer, exoneraciones a pintores de sus cátedras docentes, cierre de la Bauhaus, retiro de pinturas de colecciones públicas, reclusión en campos de concentración, artistas enrolados en el ejército y muertos en el frente, exilios, destrucción de ateliers, subasta de pinturas "degeneradas", son algunos de los episodios que las sucintas biografías que acompañan a las imágenes nos narran y que apenas dan cuenta de lo que significó para la humanidad -y significa aún- el vulgar autoritarismo de un gobierno de esta índole.